Comencé a practicar Budo en 1970 y trabajo como un entrenador desde hace más de 40 años.

Empecé a practicar Aikido en 1990. Mi primer encuentro con Sensei tuvo lugar a través de la pantalla, mirando una cinta de video. ¡La dinámica y el poder con el que el profesor Kitaura realizó la técnica fue asombroso!

Hay muchos maestros con un nivel altísimo, pero encontrar a alguien a quien estés listo a seguir en el Сamino es un regalo del destino.

A partir de ese momento comenzamos a practicar Aikido con los alumnos de Sensei Kitaura. Asistimos a seminarios en San Petersburgo (1993) y buscamos la oportunidad de venir al dojo de Madrid.

La primera clase en el dojo Ametsuchi tuvo lugar en 1994 y fue una fiesta. ¡Esta fiesta continúa hasta el día de hoy!

Somos muchos los estudiantes de Sensei. Todos somos diferentes, pero nos une Kitaura sensei y su visión del Aikido. Y yo estoy feliz de formar parte de esta familia.